En el mundo del wrestling profesional, pocas figuras han alcanzado la magnitud y la influencia de Chris Jericho. Su carrera ha sido un viaje de múltiples facetas, desde sus inicios en la WWE hasta su expansión global y su éxito continuo en AEW. Sin embargo, un capítulo crucial en su desarrollo como luchador se remonta a su tiempo en el Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL) en México.
El CMLL, con su rica historia y tradición en lucha libre, proporcionó a Jericho una plataforma invaluable para perfeccionar su arte. Durante su estancia en México a principios de los años 90, Jericho absorbió técnicas y estilos que enriquecieron su repertorio de movimientos todo esto bajo el nombre de “Corazon de Leon”.
La lucha libre mexicana, conocida por su énfasis en la agilidad, la habilidad técnica y la conexión con el público, influyó profundamente en Jericho, quien adaptó estos elementos a su propio estilo innovador. Además de las habilidades técnicas, el CMLL también le brindó a Jericho la oportunidad de enfrentarse a luchadores de renombre internacional y aprender nuevas estrategias de lucha. Esta experiencia no solo amplió su conocimiento del deporte, sino que también le ayudó a forjar conexiones cruciales en la industria global de la lucha libre.
El impacto de su tiempo en el CMLL se puede observar a lo largo de su carrera posterior. Desde su regreso a Estados Unidos hasta su consagración en la WWE y más allá, Jericho incorporó elementos de la lucha libre mexicana en su estilo característico, lo que lo diferenció y lo hizo destacar entre sus contemporáneos. El CMLL no solo representa una parte crucial de la historia de la lucha libre mexicana,
sino también un crisol de talento y tradición que ha influido en innumerables estrellas
internacionales.
Para Jericho, este retorno no solo significa reconectar con sus inicios, sino también un reconocimiento a la importancia de la formación que recibió en la organización. El Consejo Mundial de Lucha Libre no solo ayudó a Chris Jericho a perfeccionar sus habilidades técnicas y ampliar su conocimiento del deporte, sino que también le proporcionó una base sólida para su desarrollo como una figura icónica en la lucha libre global. Su tiempo en México no solo fue formativo, sino que marcó el inicio de una carrera extraordinaria que continúa resonando en el mundo de la lucha libre profesional hoy en día.
Jericho pudo haber ganado todos los títulos del mundo. Fue campeón en cada empresa que ha pisado. Pero es hermoso ver que no se olvida de sus orígenes. Al final del día, los hijos siempre regresan a casa, y para el legendario Chris Jericho, CMLL siempre fue su hogar.